Bloggear cuesta

Es un hecho que aparte de decidir sobre Qué Escribir, el embarcarse en la aventura de crear y mantener un blog genera algo de trabajo. Al principio nadie te lee, solo amigos y familiares a los que les has mandado n-correos diciéndoles que tienes una nueva página (esta vez no lo he hecho). Eso te da cierta ventaja, como nadie te lee, puedes escribir lo que quieras y cuando quieras, no tienes obligaciones para con tus lectores.

A partir de este momento y siempre y cuando quieras ganar cierta popularidad, puedes empezar a darte a conocer : - hola mundo, tengo un blog!!!. Te dedicas a hacerte eco (repetir) las últimas noticias geek/tecnológicas y empiezas a dejar algunos comentarios en blogs de renombre. Esto ya te ha empezado a generar cierto trabajo, aunque solo sea, el vincular otras páginas. La cosa aumenta, si decides dar cierto valor a los cometarios y a las entradas de tu blog. Hay que leer mucho y a muchos, y además ser muy, muy rápido para poder ser de los primeros en dar la noticia. Sinceramente es un trabajo muy duro, tal como comenta Enrique Dans aquí, en relación con una noticia publicada en NY Magazine:

like most A-list bloggers, he hit his keyboard before dawn and posted straight through until dinner. "Anyone can start a blog, and anyone can make it grow," he says, sipping a glass of water. "But to keep it there? It's fucking hard work, man. I've never worked so hard in my life. Eighty-hour weeks since I started."

Además, en el momento que perteneces a una A-list, es decir, eres alguien en la blogosfera, podría decirse que tienes la “obligación” de opinar sobre los temas más candentes. El no poder hacerlo, con rapidez y calidad, podría llegar a producirte cierto estrés, sobre todo si tu blog nació como un hobby, y no como un trabajo a tiempo completo.

Mi caso particular, es que no tengo tiempo de hacer todo esto. Además, no me parece adecuado bloggear desde mi trabajo, por qué requiere mucho tiempo para informarse, leer y pensar Qué Escribir (sobre todo esto último). Está claro que no es como algunos han escrito, ponerse a teclear lo primero que te pase por la cabeza. En muchos casos elaborar una entrada, puede llevarte mucho tiempo, incluso días.

La conclusión de todo esto, es que me lo voy a tomar con mucha, mucha calma y sobre todo escribiré cuando quiera y sobe lo que quiera (claro, siempre y cuando lo descubra).

Nota: Escribir esta entrada ha supuesto aproximadamente unos 65 minutos de mis dos horas de comida, a lo que he añadido otros dos ratillos en casa en el que he buscado las referencias. Lo dicho, bloggear cuesta