LapDesk

Una de las ventajas de escribir desde un portátil es poder hacerlo desde cualquier parte; sobre todo en casa, donde es usual que acabe en el sofá o a incluso en el suelo. Pero, trabajar con el portátil apoyado en las piernas no es muy cómodo, sobre todo en verano.

Por ese motivo me he comprado: LAPDESK. Se trata soporte diseñado para trabajar con el portátil sobre las piernas, que incorpora una superficie abatible para el ratón. Además de evitar que el portátil se resbale, proporciona cierto aislamiento térmico, lo cual se agradece ahora en verano, e incluso, según el fabricante mejora la refrigeración del equipo.

Es ideal, mientras escribo sentado en mi sillón POÄNG, e incluso creo que seria adecuado para mis “excursiones”, ya que cabe perfectamente en la bolsa del portátil.

Fotógrafo Profesional

¿Qué se necesita para convertirse en fotógrafo profesional? No me refiero al profesional, asociado a la prensa o a un fotógrafo de estudio dedicado a bodas, bautizos o comuniones; sino a un profesional habitual de exposiciones y demás eventos "culturales".

Lo digo porque, hoy he estado viendo algunas exposiciones de PhotoEspaña y las fotos, en general, son buenas, al igual que lo son muchas de las que aparecen flickr. Con eso no quiero quitar merito a los artistas, pero en la era digital en la que vivimos, es muy difícil sorprenderse y estamos saturados de ver imágenes impactantes.

¿Cómo se pasa de no ser nadie a hacer exposiciones? ¿Quién tiene el criterio "objetivo" de decidir que eres "bueno"?

Voy a hacer una cosa, se lo voy a preguntar a Rinko Kawauchi...

Pequeñas cosas

Me ha llamado la atención el artículo de Elvira Lindo del pasado domingo. De pronto, la felcicidad, se titula, y trata sobre esas pequeñas cosas que nos hacen los días más felicies. Cosas tan triviales como que nos salude el tendero, de una tienda a la que vamos, pero de la que tampoco somos habituales o algo tan común, como tomarnos un sandwich con una cerveza, especialmente si un mitico nº 7 (pastrami, pavo y ensalada de col) y estas en Barney Greengrass.

Esas pequeñas cosas,nos reconfortan, nos hacen sentir mejor y hacen mas llevaderos los días; y puede que incluso más féliz que aquello que se supone que realmente "queremos" (que cuando lo consigas es problable que te decepcione)

Lo malo, es que no tengo tendero y Manhattan me pilla un poquito lejos.